HEALTHLa dieta alcalina y el equilibrio del PH corporal

La dieta alcalina y el equilibrio del PH corporal

Volvemos atrás a los días de las clases de ciencia del instituto, a una de las que todo el mundo ha asistido, la del equilibrio del PH, la acidez y la alcalinidad. Si recordamos el experimento de una solución acuosa y un paquete de papel tornasol, junto con una carta de color que abarcaba desde el rojo al púrpura y que indicaba el nivel de PH en una escala del 0 al 14. En ella el rojo indica unas condiciones ácidas muy fuertes (PH<7), el púrpura indica altas propiedades alcalinas (PH>7) y el verde en la zona media de la carta para el PH neutro (PH=7). De manera que, ¿qué es el PH? El término PH significa “Potential Hydrogen” (hidrógeno potencial) que es la cantidad de iones de hidrógeno en una solución concreta, o dicho de otra manera, la medida de acidez o alcalinidad de las sustancias solubles en agua. Cuanto más contenido de iones haya, más ácida es la sustancia, mientras que bajas concentraciones de iones indican que la solución tiene unas características más básicas (alcalinas).

La importancia del equilibrio del PH en el cuerpo

Una dieta saludable fortalece las células sanas a la vez que mantiene un nivel adecuado de PH en el cuerpo, necesario para la salud general. El equilibrio lo es todo. El cuerpo humano está diseñado para mantener un equilibrio muy delicado en sus sistemas funcionales -la solución acuosa del cuerpo, aparte de los fluidos y tejidos, una de las más esenciales está en la sangre.

El PH normal de la sangre está regulado de manera firme entre 7’35 y 7’45, ligeramente alcalina, lo que significa que la cantidad de oxígeno en la sangre está dentro de lo esperable para que todas las células funcionen adecuadamente. Cuando estos fluidos se mantienen en este estrecho rango de PH, nuestro sistema inmune funciona en óptimas condiciones y es capaz de luchar contra enfermedades y dolencias. Cualquier incremento o descenso en ese PH, aun el más mínimo, puede conducir a desórdenes físicos y a un amplio rango de enfermedades.

Sin embargo, nuestro cuerpo tiene un mecanismo de control que se regula solo, el sistema homeostático, que nos protege contra la acidificación o la alcalinización del cuerpo mediante ajustes en el fluido extracelular y el tejido PH para neutralizar la sangre en un PH estricto de 7’4 o en su equilibrio normal ácido-base.

Uno de los mecanismos que mantienen un PH en la sangre relativamente constante en nuestro cuerpo son los amortiguadores disueltos en ella, también llamado el sistema amortiguador ácido-base. Estos amortiguadores son soluciones que contienen una base débil y la conjugación con su ácido, que son capaces de estabilizar el PH de una solución.

Una buena solución amortiguadora tendrá aproximadamente iguales concentraciones al conjugar los ácidos y sus bases, y en su caso puede resistir los cambios el PH añadiendo una base o un ácido, incluso en pequeñas cantidades para controlar el equilibrio del PH en el cuerpo. Un amortiguador trabaja reemplazando un ácido o una base fuertes por otra débil. Un amortiguador ácido, por ejemplo, se liberará en la sangre cuando se vuelve muy alcalina, y de manera inversa, un amortiguador básico (alcalino) jugará un papel importante si el PH de la sangre se vuelve muy ácido.

 

Restaurar el equilibrio del PH en el cuerpo con una dieta alcalina

Sin embargo, por desgracia, la dieta actual, el rápido estilo de vida y la vida sedentaria tienen un impacto significativo en nuestra salud de manera que ponen una gran carga ácida en el cuerpo y nuestro sistema de amortiguadores de PH naturales no puede seguir siempre ese ritmo. Nuestro cuerpo tiene que trabajar más duro para mantener un nivel apropiado en el PH de la sangre si hay mucha carga ácida proveniente de fuentes externas: comida, estrés, falta de ejercicio, etc.

Todas las células del organismo trabajan conjuntamente variando su alcance para mantener la sangre en un estado ligeramente alcalino, que resulta en un deterioro gradual y un envejecimiento prematuro en la salud. Un cuerpo ácido fomenta las enfermedades, específicamente el cáncer.

La dieta es probablemente la causa de la acidosis del cuerpo. Unos hábitos poco saludables en la dieta o una mala dieta, determinado tipo de comida (incluyendo la comida basura) alimentos procesados y refinados, carnes y productos lácteos, bebidas azucaradas, bebidas carbonatadas y alcohol, etc., son extremadamente ácidicos para nuestro sistema, como comer de manera alcalina puede ser la manera perfecta para equilibrar nuestro PH natural.

Los alimentos alcalinos incluyen casi todas las verduras y frutas, nueces, semillas y especias. Necesitamos comer al menos de un 75% a 80% de alimentos alcalinos y un máximo de 20% a 25% de alimentos ácidos para conseguir el equilibrio ideal ácido-alcalino.

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Comer una dieta alcalina no tiene por qué ser extremo o difícil, la mejor manera de empezar es incorporando o aumentando de manera gradual la cantidad de alimentos alcalinos en tu dieta diaria. Un cuerpo alcalino es un cuerpo más sano, podemos esperar tener un sistema digestivo mejor, un sistema inmune más fuerte, mayor recepción de energía, mejor enfoque mental y una sensación general de bienestar físico en el cuerpo.

A continuación se listan algunos de los alimentos alcalinos que son en su mayoría de hoja verde. Ten en cuenta el buscar siempre alimentos ecológicos, sin contaminar y limpios de manera natural ya que los residuos químicos pesticidas, gérmenes y la suciedad en la comida pueden ser tóxicos y dañinos cuando entran en contacto con el cuerpo.

  • Espinacas: un poderoso antioxidante, rico en clorofila y con grandes contenidos en calcio y vitaminas. un poderoso antioxidante, rico en clorofila y con grandes contenidos en calcio y vitaminas.
  • Kale: “la reina verde”, con contenido en hierro, calico, vitamina K y se le conoce ampliamente por sus beneficios antioxidantes y purificantes
  • Acelgas:proporciona mega beneficios nutricionales con vitaminas que apoyan la salud celular.
  • Pepino contiene minerales alcalinos como el calcio, el hierro, fósforo, potasio, magnesio, selenio, cobre, manganeso y cinc.
  • Brócoli rico en vitaminas C y K, es un estupendo antiinflamatorio y una Buena fuente de antioxidantes.

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